jueves, 10 de diciembre de 2009

Intervención del Zar Anticorrupción Descartan licitación para ampliación de alcantarillado en Chiriguaná


Por quebrantar el principio de transparencia y de libre concurrencia al interponer exigencias que limitaban la participación de un número plural de oferentes, la Alcaldía de Chiriguaná descartó el proceso licitatorio a través del cual buscaba ejecutar la ampliación y optimización del alcantarillado sanitario de la cabecera de este municipio. La licitación ascendía a los doce mil millones de pesos.

El zar Anticorrupción, Oscar Ortiz González, prendió las alarmas con respecto a algunas irregularidades en el proceso licitatorio e intervino a través de una comunicación enviada al Procurador General de la Nación, en la que advertía que el proceso estaba viciado porque no cumplía con el principio de transparencia.

“Cuando se realizan procesos contractuales se debe no solo buscar la obtención de los bienes o servicios en las mejores condiciones sino también generar oportunidades equitativas y probas que aseguren la efectividad de los derechos e intereses de los ciudadanos que quieren competir”, enfatizaba el Zar Anticorrupción.

Las irregularidades


El Programa Presidencial de Modernización, Eficiencia, Transparencia y Lucha contra la Corrupción detectó en el proceso irregularidades relacionadas con ítems como el de la experiencia mínima general del proponente, en donde la entidad consideraba que los requisitos exigidos eran excesivos y excluyentes.

Según el Programa de Lucha contra la Corrupción, en los pliegos se solicitó una desproporcionada experiencia general del proponente (15 años), y una facturación muy superior a la del presupuesto oficial del contrato, efectuada, además, en un corto período de tiempo. Ello se constituía en una traba a la concurrencia de potenciales interesados.

Con respecto a la experiencia mínima específica, se advirtieron también exigencias que limitaban la participación, como que el proponente cumpliera de manera simultánea requisitos relacionados con la ejecución de un solo contrato en los últimos cinco años, por un valor superior al 100% de la obra y haber instalado mínimo 30 mil milímetros de tubería, cuando el objeto de la licitación era de 18 mil aproximadamente.

De igual modo, se detectaron exigencias exageradas, no justificadas, para la acreditación de la experiencia del equipo profesional que debía presentar el proponente. Frente a ello, la carta remitida a la Procuraduría General planteaba los siguientes interrogantes: ¿Por qué 20 años de experiencia profesional para el director de obra y para el profesional especializado en ambiental y/o saneamiento básico o sanitario”? ¿Por qué todos los profesionales debían contar con especialización, maestría o doctorado, si se exigía una experiencia específica para cada perfil? ¿Por qué un titulo de especialización, maestría o doctorado debía tener una limitante en tiempo? ¿Por qué los profesionales exigidos debían haberse desempeñado en “máximo” un contrato, cuyo valor fuera superior al 100% del valor del presupuesto oficial, haber instalado mínimo 30.000 ML de tubería y haberse ejecutado en los últimos cinco años?

Sobre el presupuesto, el Programa Presidencial llamaba la atención sobre la necesidad de reorganizarlo de modo que se garantizara la claridad y la precisión en cuanto a la planeación, proyección y ejecución de los recursos.

El Zar Anticorrupción le había solicitado al Procurador General un acompañamiento preventivo para ese proceso y le había pedido al alcalde de Chiriguaná, Ramón Arturo Díaz Corzo, tomar las medidas para garantizar la observancia de los postulados rectores de la contratación pública.

FUENTE: http://www.elpilon.com.co/noticias/not00032379.htm